Se trata de una prueba piloto de nuevos alimentos basados en frutos silvestres. El proyecto Plantas Olvidadas busca alternativas sostenibles de bioeconomía forestal
Un proyecto financiado por la UE explora las posibilidades de crear y comercializar productos alimentarios basados en cinco frutos silvestres: endrinas, escaramujos, madroños, bellotas y piñas verdes. Se han elaborado 125 nuevos productos y 30 de ellos han sido seleccionados para salir al mercado. Se trata de Plantas Olvidadas y su objetivo es fomentar la bioeconomía forestal de zonas rurales y proteger los bosques.
El proyecto Plantas Olvidadas está impulsado por diversas entidades de investigación y dinamización agroecológica —Sambucus, Emys y Eixarcolant— junto con Xarxa per a la Conservació de la Natura (XCN) y la Universitat de Barcelona. Pretende desarrollar y promover el aprovechamiento de alimentos basados en los frutos silvestres señalados, todos ellos de especies muy abundantes en los bosques peninsulares, pero escasamente utilizados con fines alimentarios. Busca fomentar la economía rural y mejorar la gestión forestal y la biodiversidad incrementando la resiliencia de los bosques frente a los efectos del cambio climático.
La iniciativa comenzó a andar a principios del año 2024 en 12 fincas forestales de Cataluña. Sus impulsores realizaron diversas pruebas para optimizar los procesos de recolección de cada uno de los cinco tipos de frutos y una adecuada gestión sostenible de sus entornos naturales. Posteriormente, los frutos recolectados han formado parte de varios procesos de investigación y desarrollo en 11 obradores meticulosamente seleccionados, teniendo en cuenta su calidad, su experiencia en la transformación de ingredientes y su compromiso con la producción sostenible.
Desarrollo en obradores
Para desarrollar y comercializar estos productos innovadores se han establecido acuerdos de colaboración con los siguientes obradores: Can Gibert, Eixarcolant, Forn de Jorba, La Cleda, Bodevici, Espigoladors, Artipà, La Valiente, Xócala, Ordi Natura y Sastret’s.
Cada uno de ellos trabaja con una o varias de las referencias seleccionadas, adaptando los procesos a las características específicas de cada fruto forestal. Se han desarrollado pruebas con un total de 125 productos, y todos ellos se han producido en un entorno controlado, garantizando su calidad y evaluando su capacidad de adaptación al mercado.
Los obradores enfocan sus esfuerzos en la producción, mientras que las entidades impulsoras del proyecto se encargan de la investigación y desarrollo, diseño de marca y etiquetado, y también de la estrategia de distribución.
Catas y selección
Para valorar la posible aceptación de los productos entre los potenciales consumidores se han organizado más de 50 catas. Valeria de Luca, coordinadora de I+D y Producción Piloto en Eixarcolant, explica: “En general, las personas que han participado han dado valoraciones muy positivas a los productos, incluso más de lo que creíamos desde las entidades organizadoras. Muchas personas han mostrado un alto interés y han hecho numerosas preguntas sobre los ingredientes”.
Tras recopilar las valoraciones y opiniones recogidas en las catas sobre los distintos productos, 30 de ellos han sido seleccionados para escalar su producción y ser comercializados de forma piloto. La selección se ha basado en criterios de viabilidad técnica, potencial comercial y relevancia para la revalorización de recursos forestales infrautilizados.
Los 30 productos elegidos se pondrán a la venta en un total de 20 comercios de distribuidos por toda Cataluña. El catálogo de productos y los comercios participantes podrán consultarse próximamente en la web: www.eixarcolant.cat/plantesoblidades
Compromiso y perspectivas de futuro
Los acuerdos de comercialización incluyen una primera fase piloto de seis meses, durante la cual se producirán 500 unidades de cada producto para estudiar su viabilidad comercial. En caso de éxito, se prevé una segunda fase de mayor producción con un nuevo contrato de colaboración.
Con esta iniciativa, las entidades del proyecto Plantas Olvidadas y los obradores participantes no solo impulsan la innovación en productos forestales, sino que también promueven modelos de producción sostenibles y una economía agroalimentaria basada en recursos locales y en la conservación de la biodiversidad.
El proyecto cuenta con el apoyo de la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO) en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR), financiado por la Unión Europea – NextGenerationEU.
Fotografía: Cortesía de MITECO
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